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Si estás al tanto de ello, lo puedes sentir, o puedes hablarle a ese Maestro que está contigo, pero mucha gente está ciega, sorda. (Sí). Por eso, alguna gente puede ver al Maestro que está con ellos en su casa. El Maestro no sigue apareciendo todo el tiempo, caminando contigo todo el tiempo, ya que te deja tu privacidad. Pero el Maestro está siempre al tanto de tu presencia. (Sí). Y si tienes algún problema, trata de ayudarte todo el tiempo, incluso antes de que lo pidas. (Vaya). Cada uno de los así llamados discípulos, mis discípulos tienen un Maestro con ellos. Cada uno de vosotros tiene un Maestro, protegiéndoos las 24 horas/7 días. (Vaya. Gracias, Maestra). Pero si no lo hacéis de verdad por Dios, cuando venís a la iniciación y no lo hacéis de verdad por Dios, por la elevación de vuestra alma, entonces no tenéis uno, aunque estéis iniciados. Y si los así llamados discípulos de alguna manera se vuelven en contra, traicionan a La Maestra por alguna razón, o no respetan a La Maestra, entonces el Cielo no les permitirá tener a un Maestro con ellos. (Oh). Serán vulnerables. Estarán ellos solos. (Vaya. Sí). Y si no están de alguna manera con el grupo, como nuestro grupo, entonces fácilmente enferman o mueren o son atacados por la fuerza del mal. Porque no tienen al Maestro con ellos. Pero nosotros los humanos somos muy, muy afortunados. Las personas-perro, incluso si les diera la iniciación, no tienen un Maestro con ellos. Esa es la ley. (Oh, vaya. Sí, Maestra). La Maestra puede rescatarlos y todo eso, está bien, pero no se les asigna que tengan un Maestro con ellos. (Vaya) No pueden. (¿Por qué es eso, Maestra?) Son una categoría diferente. (Vale). Incluso si provienes del Cielo, y decides ser una persona-perro para ayudar a algunos de los que antes eran tus amigos o parientes, o para ayudar a alguien que se merece tu ayuda, aun así no tienes un Maestro. (Vaya). Incluso aunque seas iniciado. (Sí, Maestra). Tiene que ser realmente especial. Los humanos son muy afortunados. (Vaya. Sí, claro). Los humanos pueden alcanzar la Budeidad. (Vaya). Solo algún excepcional, diferente; quizás una o dos excepciones, pero la mayoría no puede. Si eliges ser una persona-perro, tienes que ser una persona-perro. Te comportas como una persona-perro. Entonces, si tienes ojos Celestiales, si tienes el ojo psíquico para ver, y si ves a alguien que no tenga un Maestro a su alrededor, entonces sabes que esta persona no es real. (Ah. Claro). Está trabajando para el demonio. Viene sólo para crear problemas. Incluso aunque la Maestra los perdona, los tolera y no les hace nada, pero aún así ellos no pueden tener el privilegio de un iniciado. No pueden tener un Maestro con ellos. Como el agua y el fuego que no se mezclan. (Sí, Maestra). Es casi que automático. (Sí).
